El calor del verano nos afecta a todos, pero en especial a algunos grupos de personas entre los que se encuentran las embarazadas, ya que se vuelven más vulnerables a los efectos del calor ya que la temperatura corporal de por sí sube por el mero hecho de estar embarazada.
La ginecóloga Josefina López nos ofrece una serie de consejos para que puedan llevar mejor estos meses de verano:
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- Mantenerse en lugares frescos y pasear cuando ha bajado el sol
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- Utilizar ropa holgada y fresca que favorezca la traspiración y la circulación
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- Comer muchas frutas y verduras por su alto contenido en agua y fibra
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- Tomar lácteos frescos por su alto contenido en calcio
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- Utilizar fotoprotectores con un SPF alto (como mínimo 30)
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- Mantener los pies en alto para que éstos no se hinchen y no permanecer mucho tiempo sin andar
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- A la hora de echarse la siesta o dormir mejor hacerlo del lado izquierdo
Y por supuesto si la mamá se encuentra mal, acudir de inmediato a su ginecólogo.
