Este exceso de grasa que se deposita en cavidades justo debajo de la superficie de la piel, especialmente en los muslos y mayormente en las mujeres, deforma en gran medida la parte inferior del cuerpo, empeorando su aspecto.
Según los especialistas, la mejor forma de combatirla es la prevención, es decir, enfrentarla cuando todavía no se ha desarrollado. Si se observan indicios de su presencia, se puede frenar o ralentizar su avance llevando unos hábitos de vida saludables enfocados en dos frentes: el ejercicio físico regular y una alimentación equilibrada.
Existen, igualmente, otros tratamientos encaminados a mejorar la circulación, como el masaje de drenaje linfático así como la mesoterapia o empleo de sustancias inyectadas por vía intradérmica con objeto de conseguir efectos farmacológicos y restructurar todo el tejido.
Según el Dr. Antonio de la Fuente, jefe de Servicio de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora del Hospital Nuestra Señora del Rosario, no hay que descartar otras medidas: «En cuanto a la aparatología existen técnicas que pueden mejorar la celulitis como la radiofrecuencia y la vacumterapia o técnica de vacío que ayuda a eliminar sustancias de desecho, la carboxiterapia y la presoterapia».
En un artículo del suplemento Bienestar, del diario ABC, encontrarás igualmente algunas recomendaciones de actuación sugeridas por la Vocalía Nacional de Dermofarmacia del Consejo General de Colegios Farmacéuticos: https://www.abc.es/bienestar/fitness/entrenamiento-ejercicios/abci-como-quitar-celulitis-piernas-y-gluteos-202203190022_noticia.html
