embarazo

Se denomina puerperio al periodo comprendido entre el parto hasta la aparición de la primera menstruación. Este periodo duele durar entre 6-8 semanas (40 días como media)

 

Cronológicamente se divide en:

  • Puerperio inmediato: Comprende las primeras 24 horas postparto
  • Puerperio clínico: Hasta el séptimo día del parto
  • Puerperio tardío: Desde el octavo día hasta la primera menstruación

Alteraciones anatómicas en este periodo

Durante este periodo tras el parto se producen dos tipos de cambios en la mujer.

      • Cambios locales
        • Involución uterina: tras la expulsión de la placenta, el útero se contrae, pudiendo ayudar nosotros a su involución con un suave masaje en fondo el uterino, que se encuentra aproximadamente a dos dedos bajo el ombligo. El objetivo también es que el útero vuelva a su posición y tamaño normal
        • Involución del cérvix
        • Involución vulvo-vaginal: la elasticidad vaginal hace que ésta pueda recuperar rápidamente su calibre normal. La vulva aparecerá edematosa y congestiva. La cicatrización de la episiotomía se completará en aproximadamente 7 – 10 días (salvo que se complique con hematomas o procesos infecciosos).
        • Loquios: se llama así al exudado genital del puerperio constituido por hematíes, células deciduales y descamaciones del endometrio y cérvix. Hay tres tipos de loquios:
          • Loquios rojos:compuestos por hematíes hasta el tercer día.
          • Loquios amarillos:del tercer al sexto día donde preodominan los leucocitos
          • Loquios blanquecinos:hasta el décimo día, dónde predominan leucocitos, exudados de la herida y gérmenes saprófitos

          La persistencia durante más tiempo, un aumento en su producción o la existencia de olor fétido nos pondrá en alerta.

        • Musculatura perineo-abdominal:la tonicidad se recupera paulatinamente. La diástasis (separación) de los músculos rectos del abdomen es frecuente.
  • Cambios generales
      • Temperatura: lo normal es que se mantenga entre 36,5º y 37º. Cualquier elevación de temperatura que supere 38º en dos tomas sucesivas separadas ocho horas nos debe hacer pensar en un proceso infeccioso.
      • Frecuencia cardiaca, tensión arterial y pulso:la frecuencia cardiaca tiende a disminuir y la tensión arterial se mantendrá en cifras normales. Hay que estar alerta ante una taquicardia o elevación de la tensión arterial.
      • Sangre:debido a la pérdida sanguínea tras el parto se produce una anemia. Si la anemia es severa requerirá aporte de sales ferrosas o transfusiones sanguíneas.
      • Sistema urinario:son frecuentes los episodios de retención urinaria por hiperdistensión de la musculatura. Cualquier mujer que no haya orinado a las 12 horas del parto debe someterse a sondaje vesical.
      • Aparato digestivo:por la rápida distensión del tracto gastrointestinal se produce hipotonía (disminución de la tonicidad muscular) favoreciendo el estreñimiento y pesadez postprandial.
      • Piel y mucosas:las estrías cutáneas (si las ha habido) adquieren una tonalidad nacarada. Las zonas del cloasma gravídico (manchas faciales)se irán aclarando.
      • Peso:tras el parto se perderán entre 5 y 6 kilos.
      • Aparato respiratorio:la respiración se normaliza y vuelve a ser abdominal.
      • Metabolismo:con los carbohidratos se producirá una tolerancia aumentada a la glucosa, no debiendo dar un diagnóstico de diabetes hasta la normalización de este estado temporal.

    Dra. Carmen Herrera, ginecóloga del Hospital Nuestra Señora del Rosario