Seguramente, cuando alguna persona que dormía a nuestro lado ha comenzado a hablar en sueños, hemos tenido la tentación de escuchar atentamente lo que decía, de seguir la conversación o de despertarla. ¿Qué hay que hacer en estos casos? ¿Qué opinan los especialistas al respecto?

Hablar en sueños o somniloquia es uno de los fenómenos más frecuentes durante el descanso. Algunos estudios aseguran que dos de cada tres personas hemos tenido somniloquias en algún momento a lo largo de nuestra vida, siendo más frecuente en edades tempranas.

El Dr. Jorge Gómez Corral, neurólogo y especialista en trastornos del sueño del Hospital Nuestra Señora del Rosario, explica en un artículo publicado en el suplemento Bienestar, del diario ABC, que se trata de un fenómeno benigno y que detrás de él puede haber un componente genético, pero también precipitantes que lo estimulan: estrés emocional, la privación de sueño, sustancias como el alcohol, algunos medicamentos o procesos febriles.

En principio, detrás de la somniloquia aislada no tiene por qué existir un trastorno subyacente. Según el neurólogo, puede formar parte de otras parasomnias más complejas, como el sonambulismo o el trastorno de conducta del sueño REM, “pero en estos casos las vocalizaciones pasan a un segundo plano”. También puede estar asociada a los microdespertares del síndrome de apnea del sueño o a crisis epilépticas nocturnas, pero no debe ser motivo de alarma. Asegura el especialista que son mínimas las repercusiones en la vida de una persona y muy rara vez se necesita una intervención.

¿Qué hacer?

El experto asegura que resulta indiferente despertar a quien habla en sueños. Según abunda, se sabe que es frecuente que los sonidos, palabras o frases emitidos mientras dormimos “recuerden a una discusión o a una conversación tensa” y se cree que pueden tener relación con el contenido de los sueños, pero no siempre se ha encontrado una buena correspondencia: “Ni siquiera tienen por qué estar teniendo una pesadilla”.

El primer paso terapéutico pasa por mejorar la higiene del sueño del paciente. La consulta con un especialista es recomendable cuando se habla dormido repentinamente como adulto, si involucra miedo intenso, gritos o acciones violentas o si interfiere con el sueño o con el descanso de las personas que comparten cuarto.