Con el objetivo de tratar a pacientes con dolor crónico y mejorar su calidad de vida, las Unidades del Dolor están integradas por especialistas en Anestesiología y Reanimación, donde se realiza un abordaje más integral de las necesidades terapéuticas de los pacientes
“Los casos más complejos podrían beneficiarse de técnicas regionales e implantación de dispositivos para el tratamiento del dolor”, señala el Dr. Ángel Alonso Chico, de la Unidad del Dolor del Hospital Nuestra Señora del Rosario.
Estas unidades realizan un estudio y diagnóstico de los procesos de dolor crónico para entender mejor los mecanismos implicados y aplicar así el tratamiento más específico, lo que implica habitualmente valorar al paciente y solicitar pruebas complementarias, como analíticas de imagen, y pruebas neurofisiólogicas.
Las técnicas intervencionistas son las más específicas de una Unidad del Dolor y se realizan en el quirófano con ayuda de rayos X y una pequeña sedación, de ser necesario. Generalmente se aplican en pacientes que no han respondido el tratamiento médico inicial..
Los tratamientos más habituales y específicos son: bloqueos nerviosos y técnicas de radiofrecuencia, epiduroscopias y estimulación medular.