La ptosis palpebral se define como aquella malposición en la que el párpado superior se presenta descendido respecto a su posición anatómica normal. Es lo que popularmente se conoce como “párpado caído”.

Según explica la Dra. Cristina Niño, oftalmóloga del Hospital Universitario Nuestra Señora del Rosario, son muchas las causas que pueden dar origen a esta malposición, siendo las más frecuentes por grupos de edad las siguientes: la malformación del aparato muscular del párpado en niños en la ptosis congénita (>40%), la inflamación en pacientes jóvenes y la pérdida de anclaje de fibras musculares en pacientes de edad avanzada (30%). Hay otras causas, como las enfermedades musculares o neurológicas que comprometan la función del músculo elevador del párpado superior, el porte de lentes de contacto, los traumatismos, ciertos tumores, etcétera.

Síntomas de la ptosis palpebral

¿Cuándo podemos sentir que padecemos ptosis palpebral? “Cuando el paciente percibe un defecto estético, que puede acompañarse, según la severidad, de pérdida de visión y de campo visual superior”, continúa la Dra. Niño. Resulta de especial importancia detectarla para su estudio y tratamiento durante los años de la infancia, pues con ello se evitaría el desarrollo de una ambliopía, también denominada “ojo vago”.

En ocasiones, otras patologías pueden dar un falso aspecto de ptosis (pseudoptosis), por lo que deben ser correctamente identificadas con el fin de proporcionar un abordaje terapéutico adecuado. Es el caso de ciertos estrabismos, de pérdida de volumen orbitario, de exceso de piel, etc.

La cirugía, tratamiento más adecuado

Si bien existen algunas causas de ptosis que pueden acometerse con tratamiento médico para ponerles solución, en la gran mayoría de casos la cirugía será el abordaje más adecuado. Actualmente existen técnicas quirúrgicas que rescatan el músculo que perdió el anclaje y otras que se realizan con el objetivo de reforzar la función de elevación del aparato muscular del párpado superior.

La especialista hace un llamamiento para que, en el caso de detectar una ptosis palpebral, se acuda al oftalmólogo para que, una vez realizado el correcto diagnóstico, establezca un tratamiento precoz e individualizado en función de su causa y de su gravedad.