El cáncer de vejiga no es una enfermedad rara, ya que es el quinto más común en la Unión Europea, con más de 200.000 casos al año, y el sexto en el mundo. Siendo hasta cuatro veces más frecuente en los hombres que en las mujeres.
¿Dónde se origina? En las células del revestimiento interno de la vejiga y puede ser clasificado como cáncer de vejiga no invasivo o como invasivo. Para ambos casos, un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado serán cruciales para superarlo.
Según los especialistas del Equipo Integral NSR, del Servicio de Urología y Andrología del Hospital Universitario Nuestra Señora del Rosario, existen diferentes métodos de diagnóstico:
- Cistoscopia. Es una técnica en la que se inserta un tubo delgado y flexible a través de la uretra para visualizar el interior de la vejiga y buscar signos de anomalías.
- Durante esta técnica, normalmente se realiza una biopsia de tejido sospechoso para su análisis en el laboratorio.
- Además, los estudios de imagen, como la ecografía, la tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (RM), desempeñan un papel importante en el diagnóstico, pues permiten evaluar la etapa y la extensión del cáncer, así como identificar la presencia de tumores adicionales en el tracto urinario.
- Adicionalmente, la prueba de marcadores tumorales en la orina puede ser usada también para diagnosticar.
Tratamiento quirúrgico
Según los expertos de Equipo Integral NSR, el tratamiento quirúrgico es una opción común para el cáncer de vejiga, siendo las dos técnicas más utilizadas la resección transuretral (RTU), que permite extirpar el tumor a través de la uretra, y la cistectomía radical, que implica la extirpación completa de la vejiga y, en algunos casos, la eliminación de los ganglios linfáticos cercanos.
Terapia intravesical
La terapia intravesical es un tratamiento empleado específicamente para el cáncer de vejiga no invasivo. Consiste en la administración de medicamentos directamente en la vejiga a través de un catéter. Después del mismo es importante someterse a revisiones periódicas para detectar cualquier signo de recurrencia o nuevos tumores.
Además, se recomienda adoptar un estilo de vida saludable:
– Dieta equilibrada
– Actividad física regular
– Evitar el consumo de tabaco
En conclusión, comentan desde Urología Integral NSR, “el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado son fundamentales para el manejo exitoso del cáncer de vejiga”. En caso de sospecha o duda, consultar a un especialista en urología oncológica.
