Disfrutar de una sesión de sauna o relajarse en un spa, después de una jornada de trabajo o como remedio para paliar la ansiedad o el estrés diarios, representan un estupendo plan. Ahora bien, ¿qué factores hay que tener en cuenta para que la visita a estos espacios resulte perfecta y sumamente provechosa?

 

En un artículo publicado en el suplemento Bienestar, del diario ABC (https://www.abc.es/bienestar/fitness/abci-precauciones-debes-tener-si-sauna-o-202205030012_noticia.html), la Dra. Olga Marqués Serrano, dermatóloga del Hospital Nuestra Señora del Rosario, comenta que la principal precaución a tener presente al acudir a estos centros está relacionada con la piel: “Hay que entrar a la sauna o el spa con la piel limpia, sin restos de maquillajes, ni de desodorante, ni de colonias. Siempre es aconsejable darse una ducha antes, y preferible con agua tibia”.

 

Y añade la especialista que tampoco se debería acudir con la piel recién exfoliada por la dermatitis irritativa que va a desencadenar. Además, el vapor y las altas temperaturas provocan en nuestro organismo una reacción de vasodilatación, por lo que las personas hipotensas deben tener precaución ante  la posibilidad de sufrir una bajada de tensión arterial.

 

Además de extremar al máximo las medidas higiénicas, la Dra. Marqués Serrano comenta que es aconsejable el uso de gorro de baño, puesto que el agua de la piscina reseca el cabello debido a la diferencia de pH.

Como consejos para después de la sauna, la dermatóloga del Hospital Nuestra Señora del Rosario comenta que como tras la sesión se eliminan toxinas y restos de células muertas que encuentran en la piel, “tras un baño con agua templada, nuestra piel está preparada para completar el proceso y absorber todas las sustancias que aporta una buena hidratación”.

Recomendaciones

El reportaje de ABC Bienestar incluye también una serie de recomendaciones para usuarios de sauna y spa:

  • Darse una ducha antes de acudir a la sauna.
  • No aplicar cremas solares, aceites ni lociones previamente.
  • No usar prendas excesivamente ajustadas o sucias.
  • No depilarse previamente.
  • Llevar siempre chanclas.
  • Evitar el uso de lentillas.
  • Ir bien hidratados.
  • No sobrepasar los 10-15 minutos en la sauna porque puede aumentar la frecuencia cardiaca y causa mareo.
  • Beber entre tres y cuatro vasos de agua al finalizar la sesión.